El Objetivo de Desarrollo Sostenible – ODS 3 busca garantizar una vida sana y promover el bienestar de todos a todas las edades como elementos esenciales para el desarrollo humano. Por primera vez desde su aprobación, el Sustainable Development Report 2021 -informe anual, cuantitativo e independiente sobre el progreso de los Estados miembros de Naciones Unidas-, muestra retrocesos significativos en el camino a la consecución de los ODS como consecuencia de la crisis global derivada de la COVID-19.
La COVID-19 ha tenido impactos muy perjudiciales en el desarrollo de la Agenda 2030, concretamente para el ODS 3, dificultando muchos de los avances ya logrados desde su aprobación en 2015. En lo relativo a salud y bienestar, antes de la crisis global, la Agenda ya implicaba importantes retos en el alcance de este objetivo para 2030. Se consiguieron grandes logros en la mejora de la salud de millones de personas, concretamente en el aumento de la esperanza de vida y la reducción de algunas de las causas de muerte comunes asociadas con la mortalidad infantil y materna[1]. En el caso de España, el avance del ODS 3 es de progreso y su situación es mejor que la UE, de acuerdo con el Informe de progreso hacia los ODS en el contexto de la UE de la Eurostat.
La pandemia constituye un antes y un después en lo referente a la prevención y preparación ante emergencias sanitarias y la inversión en servicios públicos básicos. No obstante, es necesario más apoyo y esfuerzo por parte de instituciones públicas y sector privado para erradicar numerosas enfermedades y reducir los principales problemas de salud.
En 2021 solo 4 países de los 37 que conforman la OCDE logran la consecución del ODS 3. Se produce un 11% de cumplimiento, lo que supone un 2% menos que el año 2020[2].
Las Naciones Unidas recomiendan una financiación más eficiente de los sistemas de salud y un mayor acceso al personal médico, entre otras medidas, para poder lograr avances significativos en la consecución del ODS 3, ofrecer unos servicios públicos de calidad, asegurar la realización de los derechos humanos y la adopción de medidas ambiciosas para erradicar las desigualdades y abordar la emergencia climática.
Las empresas juegan un papel fundamental ante el reto de la Agenda 2030 y la consecución del ODS 3, teniendo que implementar medidas pertinentes para la protección los derechos humanos, y la adopción de medidas ambiciosas para reforzar la salud y la seguridad de sus empleados y grupos de interés. El impacto de la COVID-19 ha provocado una creciente integración de la salud como elemento central de las estrategias empresariales. Tal y como analizamos desde Forética en el Observatorio IBEX 35 sobre salud, bienestar y sostenibilidad, las empresas del IBEX 35 reflejan un número más elevado de medidas e iniciativas vinculadas al ODS 3 Salud y Bienestar en 2020 que respecto al año anterior, pasando a ser 54% de las empresas frente al 41% en 2019.
Desde el Grupo de Acción de Salud y Sostenibilidad en Forética analizamos estos retos fomentando el liderazgo, conocimiento y la colaboración para apoyar a las empresas e integrar los aspectos de salud y bienestar como eje fundamental de la sostenibilidad empresarial. Este otoño arrancamos la tercera edición del Grupo con el objetivo de seguir apoyando al fortalecimiento de los aspectos de salud en la agenda de sostenibilidad.
[1] OBJETIVO 3 BUENA SALUD. Joint SDG Fund.
[2] Sustainable Development Report 2021The Decade of Action for the Sustainable Development Goals.
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Senior Manager de Forética y Responsable del Área Social de Forética
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