Mitiga Solutions presenta su guía completa sobre las regulaciones de riesgos climáticos: descárgala aquí
Los fenómenos meteorológicos como olas de calor, inundaciones, sequías e incendios son cada vez más frecuentes. Durante el año 2023, la Unión Europea (UE) experimentó pérdidas económicas directas relacionadas con estos eventos, estimadas en 13 mil millones de euros. En el contexto español, la sequía del año pasado provocó pérdidas económicas de hasta 4.717 millones de euros. En las próximas décadas, se espera que el aumento de la temperatura en Europa continúe siendo más rápido que el promedio mundial, lo agravará las disparidades de riesgo en la región.
Resulta inequívoco negar los efectos que estos eventos pueden tener en los ecosistemas, las infraestructuras, la alimentación, la salud e incluso en la economía y las finanzas. Ante la falta de reconocimiento del impacto que estos pueden tener por parte de los agentes económicos, cada vez más países han implementado normativas obligando el reporte de riesgos climáticos. Brasil, Hong Kong, Singapur, la UE, Suiza, Reino Unido y Estados Unidos han sido algunos de los estados que ya han emitido una ley o una propuesta. De hecho, para el año 2025, los mercados que requerirán estos informes abarcarán hasta el 56% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial.
En los últimos años, la UE ha implementado varios instrumentos legislativos clave para el reporte de sostenibilidad: la Directiva sobre la elaboración de informes de sostenibilidad de las empresas (Corporate Sustainability Reporting Directive, CSRD), la Taxonomía de la UE para actividades sostenibles (EU Taxonomy for Sustainable Activities, EUT) y el Reglamento sobre divulgación de información financiera sostenible (Sustainable Finance Disclosure Regulation, SFDR).
A partir de 2024, todas las empresas que superen los 50 millones de euros en facturación neta, tengan más de 25 millones de euros en activos y más de 250 trabajadores, estarán obligadas a reportarse según la CSRD. Además, esta legislación europea requerirá que aquellas empresas no europeas con una facturación en la región superior a 150 millones de euros también cumplan con la normativa.
El cambio climático representa un riesgo financiero no solo en Europa, sino que también a nivel global. Impulsado por la Task Force on Climate-related Financial Disclosures (TCFD), en 2015 se inició el desarrollo de un marco para ayudar a las empresas públicas y privadas a divulgar de manera más efectiva los riesgos y oportunidades relacionados con el clima. En 2024, esta tarea fue transferida al International Sustainability Standards Board (ISSB), que continuará supervisando y creando recomendaciones pertinentes.
El marco establece que las empresas deben divulgar información sobre los riesgos y oportunidades relacionados con el clima en cuatro áreas: estrategia, gobernanza, gestión de riesgos y métricas y objetivos. Esto incluye detalles sobre cómo la empresa gestiona estos riesgos y oportunidades, así como los procesos de gobernanza y supervisión. También requiere información sobre cómo se identifican, evalúan y monitorean estos aspectos, integrándolos en el proceso general de gestión de riesgos de la empresa. Finalmente, exige comprender el desempeño de la empresa en relación con estos aspectos, incluido el progreso hacia los objetivos relacionados con el clima y aquellos requeridos por ley o regulación.
Es indudable que la normativa está instando cada vez más a empresas de alrededor del mundo a incluir información sobre su riesgo climático. Una mayor transparencia sobre los riesgos y oportunidades requiere guías de conocimiento sobre estas regulaciones, además de herramientas como EarthScan, que ayuden a las empresas a analizar su exposición al riesgo climático, cumpliendo con la legislación europea y tomando decisiones de inversión más rentables y sostenibles.
Esta tribuna ha sido escrita por Mitiga Solutions. Fundada en 2018, Mitiga Solutions combina la ciencia, la inteligencia artificial y la computación de alto rendimiento para generar inteligencia sobre riesgos climáticos. Ayudamos a nuestros clientes a entender y a actuar sobre su exposición al riesgo climático a través de nuestra plataforma SaaS EarthScan™ y de nuestros modelos de riesgo de alta precisión. Nuestra misión es potenciar la resiliencia de las empresas ante el desafío climático. Mitiga está basada en Barcelona y tiene como inversores a Kibo Ventures, Telefónica, Microsoft Climate Innovation Fund, Nationwide Ventures, Creas IMPACTO y Faber.