El 19 de agosto celebramos el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, un día en el que no podemos evitar poner el foco en conflictos como el de Ucrania o el de Gaza, pero también en contextos mucho menos mediáticos que llevan años padeciendo las consecuencias de una crisis humanitaria. Es el caso de Afganistán donde millones de vidas están en riesgo. El cambio climático, la inestabilidad política, la violencia y el conflicto se han combinado para convertir a este país en uno de los lugares más peligrosos y difíciles para ser niño. En Afganistán, a pesar de las difíciles condiciones, el personal de World Vision sigue trabajando sin descanso para ayudar a las personas más vulnerables. 

Desde que estalló el conflicto en Siria hace ya 13 años, World Vision comenzó a implementar sus intervenciones sobre el terreno, desde la provisión de necesidades básicas hasta la reconstrucción de hogares y vidas. Hoy, seguimos fieles a nuestra promesa de apoyar a los desplazados internos sirios mediante programas integrados en múltiples regiones, junto con las personas refugiadas sirias que buscaron seguridad en Líbano, Jordania y Turquía.

Las crisis que padecen tango Siria como Afganistán tienen algo en común, que está presente en cualquier emergencia humanitaria: el hambre. Factores como los conflictos, el incremento en el precio de la comida y el combustible, la pandemia y sus consecuencias económicas, o el cambio climático, son impulsores de la mayor crisis de hambre en el mundo de los últimos tiempos, una crisis que afecta a casi 45 millones de personas en 37 países. 

La desnutrición mata a 3,1 millones de menores de 5 años cada año. Estos son las vidas de alrededor 8.500 niños y niñas cada día. Mientras, en la actualidad, se desperdicia un total de 7,7 millones de toneladas de alimentos anuales solo en España. Es decir, vivimos en un mundo en el que tratamos de encontrar la solución para gestionar nuestra basura y desperdicios, mientras miles de niños y niñas van a morir de hambre.

El camino a un mundo sin hambre

Desde World Vision creemos que ya ha sido suficiente, hay comida en el mundo para todas aquellas personas que lo habitamos, simplemente es necesario tomar conciencia y pasar a la acción. World Vision está respondiendo a esta emergencia global con una inversión de 2.000 millones de dólares, la más grande en la historia de la organización, bajo su campaña Suficiente con un objetivo claro: alcanzar a 30 millones personas​ que padecen hambre. El objetivo es claro y sabemos cómo hacerlo ya que el 80% de los niños y niñas que reciben tratamiento contra la desnutrición por parte de nuestra organización se curan. Sin embargo, solo el 25% de los niños y niñas afectados acceden a dicho tratamiento. Sencillamente necesitamos más aliados, más inversión, más voluntad… más ayuda. 

World Vision quiere hacer visibles a los niños y niñas en las estadísticas mundiales y nacionales sobre hambre y nutrición, impulsar un cambio real en los lugares donde la infancia recibe ayuda alimentaria -programas de asistencia alimentaria de emergencia, comidas escolares y servicios de salud comunitarios- y liderar los esfuerzos mundiales para conseguir que se invierta más y mejor ayuda en acabar con el hambre y la malnutrición infantil. Pero no podemos hacerlo solos, necesitamos a la comunidad internacional, estados miembros, gobiernos locales, ciudadanía y empresas para hacer posible un cambio real.  

Tenemos a un gran aliado 

En este momento, gracias a un acuerdo con el Programa Mundial de Alimentos, cada euro donado a World Vision se multiplica por 45​. Es decir, una donación que un particular o una empresa haga de 1.000€, se convierte en 45.000€ destinados a comprar alimentos para los más vulnerables. Gracias a esta alianza podemos llegar mucho más lejos y ser más rápidos para ayudar a aquellos que están en riesgo de morir de hambre hoy.

¿Cómo es esto posible?

El Programa Mundial de Alimentos, cubre el coste de los alimentos o las entregas en efectivo y el precio de llevarlos hasta la capital del país dónde hacen falta​. Mientras, gracias a tu donación, World Vision cubre el coste de hacer llegar los alimentos desde la capital hasta la zona donde se encuentran las familias que los necesitan​, y así, una vez allí podemos:​

• Mejorar el acceso a alimentos para los hogares afectados a través de vales de dinero en efectivo ​
• Dar comida terapéutica, altamente nutritiva, y recuperar a niños/as con desnutrición aguda grave.​
• Dar alimentación adecuada a mujeres embarazadas y lactantes, para que ellas y sus bebés tengan los nutrientes adecuados para su desarrollo.​

¿Hacen falta más explicaciones para animarte a dar el paso?