Inteligencia Artificial y ética: el desafío de liderar un futuro responsable
Por Xavier Gangonells
Director general de AED (Asociación Española de Directivos)
La Inteligencia Artificial se ha convertido en una de las tecnologías más influyentes de nuestro tiempo y su impacto en la sociedad y el mundo empresarial es incuestionable. Debido a su veloz avance, es crucial que adoptemos un enfoque equilibrado que permita aprovechar sus beneficios mientras gestionamos de manera efectiva sus desafíos y riesgos.
Los directivos españoles, conscientes de los cambios que puede conllevar en sus organizaciones y en la economíaen general, nos enfrentamos a decisiones estratégicas que deben conciliar el impulso de la innovación y la protección de los valores fundamentales de nuestra sociedad. A pesar de la disparidad de opiniones existente en cuanto al nivel de rigidez que debe incluir su regulación, es importante recordar que no podemos permitir ni que las normativas descuiden la ética, ni que se conviertan en un obstáculo para el progreso.
Y este esfuerzo no recae únicamente en los organismos públicos -que deben promover consensos y criterios globales que respondan a los requerimientos de privacidad, seguridad, equidad y transparencia en el uso de la IA, entre otros- sino que, a nivel interno, el tejido empresarial tiene el reto de liderar la implementación de estatecnología y establecer políticas y directrices que garanticen un uso ético y responsable.
Para ello, existen distintos mecanismos que, correctamente aplicados, pueden ser de gran utilidad, como la evaluación del impacto ético antes de implementar sistemas de Inteligencia Artificial. Esto implica considerar, antesde iniciar cualquier actividad con IA, cómo puede afectar a empleados, clientes, proveedores y al conjunto de la sociedad. La ética debe ser un principio fundamental en todas las etapas de su desarrollo y despliegue y es crucial anticipar posibles consecuencias no deseadas.
En aras de proporcionar un marco ético sólido y eficiente, la elaboración de guías corporativas sobre el uso de la IAson un buen comienzo. Estos manuales deben ser el punto de referencia para toda la organización, garantizando que se utiliza de manera eficaz, apropiada y ética. Además, la incorporación de indicadores permite medir el impacto y tomar decisiones informadas.
El análisis de procesos internos también es de vital relevancia para identificar oportunidades de automatización y eficiencia, así como para evitar utilizaciones incorrectas. La IA puede transformar la forma en que las empresas operan para ganar en competitividad y eficiencia a largo plazo, y para aportar más valor a sus clientes. Si bien es cierto que algunas compañías ya han comenzado a implementar esta tecnología en áreas específicas, como el análisis de datos o la predicción de tendencias, el verdadero valor de la IA se materializará amedida que exploremos nuevas aplicaciones y modelos de negocio. Con el tiempo, se convertirá en un elemento más integral en la toma de decisiones estratégicas y en la seguridad y privacidad de los datos empresariales.
En este sentido, la formación específica es una parte imprescindible en el proceso de adopción de esta tecnologíaen las empresas, tanto de los profesionales de la dirección como de muchos de los trabajadores de la mayoría de lasorganizaciones, en un entorno empresarial en constante evolución que se ve cada vez más impactado por la tecnología. La IA no es simplemente una herramienta, sino un poderoso agente de cambio social y económico que está permeando en prácticamente todas las industrias. Es esencial proporcionar formación y concienciación sobre su uso ético y responsable con la finalidad de garantizar la comprensión de las implicaciones de la tecnología y estar preparados para tomar decisiones adecuadas.
Para salvaguardar que las actividades relacionadas con la IA se desarrollan de manera ética y responsable, espreciso verificar que estas se han llevado a cabo correctamente. Por este motivo, también es importante que un comité de supervisión efectúe un seguimiento continuo y pormenorizado y se asegure de que se ejerzan de maneraética y con responsabilidad.
En definitiva, la adopción de la Inteligencia Artificial marca un hito en la historia empresarial y tecnológica de nuestro tiempo. La IA ya es una realidad que ha llegado para transformar fundamentalmente la forma en que lasempresas operan y la sociedad se relaciona con la tecnología. Si bien este avance conlleva un inmenso potencial para la innovación, la eficiencia y la mejora de la calidad de vida, también plantea desafíos cruciales que deben ser abordados con responsabilidad y ética.
Como directivos, abracemos este viaje siempre bajo una regulación sensata que garantice su uso ético y responsable, una formación continua y una visión estratégica que permita aprovechar su máximo potencial. La responsabilidad y la ética deben ser los pilares que guíen esta senda, asegurando que la tecnología se convierta enun aliado valioso para la sociedad y las empresas, promoviendo el progreso de manera sostenible y beneficiosa para todos. LA IA no es el futuro, es el presente y debemos estar preparados para liderar el camino hacia un futuro responsable.
Xavier Gangonells, Director General de la AED (Asociación Española de Directivos)
Licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Universitat Ramon Llull (Instituto Químico de Sarrià) en 1996, cursó en 199 el Postgrado en Banca y Finanzas en la Universitat Pompeu Fabra, y es PDG por el IESE.
Desde el año 2011 es director general de la AED (Asociación Española de Directivos), para la que ha desarrollado su modelo de gobierno corporativo, expandido su actividad por las principales regiones económicas del país e impulsado nuevas iniciativas de éxito, como la Escuela de Consejeros, de la que es codirector.
Anteriormente fue fundador y socio de la agencia de comunicación y relaciones públicas Clotet desde 1996 hasta 2015. Paralelamente a esta actividad, entre 1998 y hasta 2005 fue Corporate Manager en CaixaBank y Senior Advisor de Ketchum de 2014 a 2016. De 2006 a 2012 fue asimismo Senior Advisor de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (Fundación CEDE).
En el ámbito institucional, destaca que fue miembro del Comité Directivo de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Marruecos en España de 2010 a 2016, así como secretario general de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Catalunya de 2000 a 2004.